Más de 500 millones de jóvenes y adultos se han unido y experimentado el poder de la educación no formal del Movimiento Scout desde su fundación en 1907.
Desde entonces, el Movimiento Scout ha seguido creciendo y ahora está activo en 175 Organizaciones Scout Nacionales. Hoy en día, más de 57 millones de jóvenes, apoyados por millones de dedicados voluntarios, participan en actividades y eventos Scouting en todo el mundo.
La educación Scout permite a los jóvenes sentirse realizados, inspirados, orientados a la acción y comprometidos con una vida con propósito. El Movimiento Scout tiene sus raíces en los ideales transformadores de igualdad, inclusión, respeto mutuo, sostenibilidad, armonía y optimismo para el futuro.
El Movimiento Scout promueve el crecimiento y desarrollo de los jóvenes como individuos y ciudadanos a través de sus programas e iniciativas. Es un movimiento educativo comprometido a garantizar que cada nueva generación de jóvenes tenga la oportunidad de desarrollar todo su potencial como líderes en su comunidad y en el mundo.
El enfoque educativo no formal del Movimiento Scout tiene como objetivo dotar a los jóvenes de las habilidades y competencias que permitan estos ideales. A través del Programa Juvenil, el Movimiento Scout apoya a los jóvenes para que se conviertan en ciudadanos activos comprometidos a servir, orientados a soluciones y enfocados en crear cambios positivos.
Como movimiento educativo no formal, el Movimiento Scout continúa explorando nuevas formas que contribuyan al desarrollo de los jóvenes. El enfoque educativo único del Movimiento Scout incluye el aprendizaje a través de actividades divertidas, compromisos al aire libre y experiencias significativas que desafían y alientan a los jóvenes a ganar confianza, coraje y disfrutar de su viaje de crecimiento dentro de un sistema estructurado.
El enfoque centrado en el alumno del Movimiento Scout valora que cada miembro joven es un individuo único que tiene el potencial de desarrollarse de muchas y diferentes maneras. Al tener en cuenta varios grupos de edad, el Movimiento Scout está diseñado específicamente para estimular el descubrimiento y el desarrollo de las personas a su propio ritmo.
El enfoque del Movimiento Scout hacia la educación está guiado por los principios y creencias fundamentales sobre los cuales se fundó el Movimiento Scout hace más de un siglo. Su objetivo es contribuir al empoderamiento de las personas y su desarrollo como ciudadanos activos en sus comunidades locales, nacionales y globales. Este proceso está guiado por un conjunto diverso de competencias en el Programa de Jóvenes Scouts que se centran en conocimientos, habilidades, actitudes y valores.